Acudir al dentista no es de agrado para nadie y más si hemos tenido algún episodio traumático en nuestra vida.
Normalmente si pensamos en el dentista nos vienen a la cabeza palabras como dolor, nerviosismo o incomodidad. Por este motivo muchas veces alargamos nuestra visita a la consulta dental lo máximo posible. Sólo acudimos cuando el dolor es muy grande y no hay más remedio.
Muchas personas tienen miedo de ir al dentista, pero en algunos casos el temor se transforma en fobia, algo que les incapacita a ir a vigilar la salud de su boca y que puede condicionar su vida. Ahora, según investigadores parece que puede haber una solución: la terapia cognitiva conductual puede ayudar a muchas personas con una fobia dental a superar su miedo de visitar al dentista y así recibir tratamiento sin la necesidad de ser sedado.
En Ziving Badía utilizamos el aprendizaje pro observación como terapia cognitiva conductual. Este tipo de terapia ha demostrado ayudar a una variedad de problemas psicológico. También se a demostrado tener éxito en la reducción de la ansiedad dental y el aumento de la asistencia dental.
Las personas con fobias dentales suelen evitar ir al dentista provocando un efecto negativo en su calidad de vida. Algunas estimaciones sugieren que alrededor de una de cada diez personas sufre de fobia dental. Existe un verdadero pánico generalizado en la población a acudir al dentista.
Estos pacientes terminan acudiendo finalmente, pero con problemas más graves y con la necesidad de realizar tratamientos complejos y más molestos desde el punto de vista clínico pero, a su vez, también más costosos.
En Ziving Badía tenemos la solución y te lo mostramos con estos videos. Mostrando una sesión de aprendizaje por observación, donde nuestra paciente Inés a podido ver en una paciente de una edad similar a la suya utilizada como modelo el proceso de una colocación de brackets. Seguido de ellos a los días ha venido a su cita de colocación. ¿Queréis ver el resultado? ¡Os sorprenderá!